Suscríbete directamente al feed del blog

El perro genio


Un carnicero está atendiendo a varios clientes cuando ve entrar a su local un perro, al que expulsa inmediatamente. Poco después el perro entra nuevamente y esta vez el carnicero observa que trae una nota en el hocico que dice:
¿Podría darme una pierna de cordero, por favor?
Vuelve a mirarlo y ve que además tiene un billete de 10 dólares en el hocico, así que el carnicero, impresionado, coge el dinero, mete la pierna de cordero en una bolsa y la coloca en el hocico del perro. Tal es su asombro que decide cerrar la tienda y seguir al perro. Éste toma una calle hasta un cruce donde se detiene, deja la bolsa en el suelo y se sienta sobre sus patas traseras para presionar el botón de cruce. Una vez que cambia la luz, coge la bolsa, avanza y llega hasta una parada de autobús. Ahí se sienta pacientemente y cuando se aproxima un bus se levanta, mira el número y se vuelve a sentar hasta que llega el autobús adecuado; es entonces cuando coge la bolsa y se sube. Ya dentro, mira por la ventana distraídamente hasta que llegan a un sector de la ciudad donde toca el timbre, se baja y comienza a andar hasta que llega a una casa. Una vez en ella, deja la bolsa en el suelo y con la cabeza empieza a golpear la puerta; como nadie la abre, da la vuelta a la casa, golpea una ventana que hay en la parte trasera y regresa nuevamente a la puerta a esperar que abran. Casi inmediatamente aparece un tipo en la puerta que empieza a gritar al perro. Es en ese momento cuando el carnicero le dice:
¡Pero hombre! ¿Por qué trata así al animal? ¡Es un genio!
A lo que el hombre responde:
¿Genio? ¿Está usted loco? ¡Ésta es la segunda vez en esta semana que olvida su llave!

(Vía e-mail) Tags:

0 comentarios:

Carrusel de spots